Ante tal trayectoria de la vida, el documental «The Internets Own Boy: The Story Aaron Swartz» [El muchacho dueño de la Internet: la historia de Aaron Swartz, en traducción libre el español], revela el lado familiar, el activismo y el trágico final de una de las mentes consideradas más brillantes del mundo del mundo de la tecnología y la informática.
El documental revela cómo el joven programador se destacó en el mundo del ciber-comunismo al intentar transformar el Internet en un lugar más democrático y justo. Swartz fue acusado por el Ministerio Público de Estados Unidos por delitos federales, que le han valido prisión y una multa de 1 millón de reales. Poco después de esa decisión, el programador de 26 años se suicidó.
La películamuestra, además de la trayectoria de una mente brillante, el principio del movimiento ciber-comunista, que ganó los adeptos y seguidores en todo el mundo y en cuya concepción la cultura, conocimiento y entretenimiento deben ser compartidos de forma más democrática. Aunque todavía hay problemas con derechos de autor, los defensores del internet libre continúan actuando y difundiendo muchas de las ideas de Aaron Swartz.
La obra permite incluso una reflexión y debate sobre hasta qué grado podemos aportar y compartir conocimientos en el ámbito de internet. ¿El mundo, en la era de la informática, se volvió más democrático o más vigilado?
Esta es una de las interrogantes latentes que la película propone. Entender los intereses políticos y los intereses personales para crear un ambiente más democrático y menos hostil, sería la premisa para entender el compromiso de este genio de la computación.
Fuente: Adital