La eficiencia en la gestión pública destaca hoy entre las prioridades del gobierno venezolano, como parte de las acciones orientadas a la transformación del estado en busca de mayor celeridad en las actuaciones de las autoridades

El proceso de ajustes, activado a inicios de julio por el presidente de la República, Nicolás Maduro, responde a la necesidad de reorganizar las estructuras a los diferentes niveles.

En ese contexto, el gabinete ministerial y los vicepresidentes de las diferentes áreas pusieron sus cargos a la orden para facilitar las modificaciones del esquema vigente.

El vicepresidente ejecutivo, Jorge Arreaza, afirmó que esta decisión permitirá a Maduro la más absoluta libertad de tomar las decisiones en cuanto a la reorganización del Poder Ejecutivo.

Entre los problemas a solucionar mencionó el burocratismo, el exceso de trámites y la necesidad de profundizar en la aplicación del gobierno electrónico.

De manera previa, el jefe de estado adelantó desde hace varias semanas un proceso de evaluación de las instituciones actuales en el aparato público del país.

Cabe mencionar que la actual administración venezolana impulsó además el denominado gobierno de la eficiencia en la calle, dirigido a favorecer el contacto directo con las comunidades.

Además, se trabaja en el reimpulso de las diversas misiones sociales con vistas a responder de manera inmediata a los desafíos que enfrenta el país, entre ellos la eliminación de la pobreza.

Fuente: Prensa Latina