El propósito de este estudio es evaluar cuáles son los factores que, en el hospedero, determinan tanto la susceptibilidad de la infección como la evolución hacia un cuadro clínico más grave.

“Sabemos que, para otros virus, como hepatitis, rotavirus y norovirus, existe una relación entre determinados grupos sanguíneos y la susceptibilidad a sufrir esas infecciones; en el caso del coronavirus, varios estudios han sugerido que las personas del grupo sanguíneo O podrían tener un menor riesgo de contraer una infección por SARS-CoV-2 que la de los otros grupos sanguíneos, pero existen varias controversias”, precisó.

 

Explicó la experta que es probable que varios marcadores biológicos relacionados con la respuesta inmunitaria o con la expresión de moléculas de superficie estén involucrados. Por ejemplo, un reciente estudio reportó que el nivel de expresión del receptor para el SARS-CoV-2 en los niños es menor que en los adultos. Esto podría explicar por qué la COVID-19 es menos frecuente en los niños.

 

“Nos planteamos investigar lo que sucede en el marco del contexto étnico de la población venezolana y, en particular, cuáles factores predisponen al desarrollo de una enfermedad más grave, entre ellos los grupos sanguíneos de los afectados y otros aspectos, como el estatus secretor que condiciona la expresión de moléculas con los que el virus podría estar interactuando, las cuales podrían interferir con la interacción con el receptor. Estos estudios se desarrollarán mediante determinación genómica de los factores en estudio”, informó.

 

De acuerdo con lo dicho por la investigadora, “en el caso de los grupos sanguíneos, los cuales se conocen como O, A, B o AB,  existen personas que, además, poseen esta otra característica, y pueden ser secretores o no de determinadas moléculas de superficies, aspecto que ha sido correlacionado con una diferente susceptibilidad, en el caso de otros virus”.

 

Señaló Vizzi que se encuentran coordinando la logística para la obtención de las muestras y del ADN genómico que utilizarán para este estudio y afinando los protocolos a utilizar, con el propósito de iniciar, en los próximos días, con la colaboración de otras instituciones, en la obtención de las muestras a partir de sujetos que han estado expuestos al virus, para ser sometidas a este análisis molecular.

 

“Para el estudio, necesitamos pacientes que han superado la infección y la enfermedad y poder analizar la presencia de estos marcadores para evaluar si hay diferencias respecto a lo indicado en otros países”, puntualizó la experta.