Al igual que Venezuela, la nación argentina ya trabaja en la construcción de su tercer satélite y recientemente firmó un convenio para concretar su lanzamiento al espacio en 2019
El segundo satélite geoestacionario de diseño, fabricación y operación argentina, Arsat-2, se lanzó al espacio dentro del cohete Ariane 5, desde la Centro Espacial de Kourou, en la Guyana Francesa, para ampliar y optimizar los servicios de telecomunicaciones, no solamente en la nación austral, sino también en todo el continente americano.
La presidenta de Argentina, Cristina Fernández, celebró el lanzamiento y anunció, en cadena nacional, el envío al Congreso de su país del Proyecto de Ley de Desarrollo de la Industria Satelital Argentina, que tendrá entre sus objetivos “proteger las posiciones espaciales de la Argentina, construir satélites y desarrollar servicios satelitales” que tengan impacto regional.
La Agencia Nacional de Noticias argentina, Telam, citó al ingeniero Guillermo Benito, trabajador del proyecto, quien explicó que el Arsat-2 mejorará los sistemas de comunicaciones y aumentará la disponibilidad de ancho de banda, abriéndole así una oportunidad al país suramericano de brindar servicios de transmisión audiovisual al continente entero y exportar los contenidos nacionales”.
Por su parte, el presidente de la compañía Arsat, Matías Bianchi, explicó que la posición orbital del satélite le permite optimizar los servicios de Internet, telefonía IP y televisión satelital a otros países, impulsando el acceso a las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) en la Región.
Asimismo, agregó que el Arsat-2 posee tres antenas, una con cobertura en Suramérica y otra en Norteamérica, ambas en la banda KU; mientras que tercera cubrirá el continente entero, a través de la banda C, utilizada en la frecuencia de transporte de contenidos.
En el marco de la puesta en órbita del dispositivo, el Gobierno argentino firmó un acuerdo con la empresa francesa Arianespace, para el lanzamiento de un tercer satélite, Arsat-3, programado inicialmente para el año 2019. De esta manera, Argentina y Venezuela son dos países en la región que actualmente trabajan en la construcción de su tercer satélite artificial.
En Venezuela, una de las políticas fundamentales del Gobierno Bolivariano es alcanzar la plena soberanía ultraterrestre, motivo por el cual se concretó, en 2008 y 2012, en lanzamiento de los satélites Simón Bolívar y Francisco de Miranda, respectivamente. Gracias a ello, Venezuela garantiza el manejo soberano de sus telecomunicaciones, en aras de consolidar el desarrollo nacional en materia aeroespacial.
Fuente: Conatel